La pujante atleta colombiana quedó en el décimo puesto de la final de salto triple y se despidió de los juegos olímpicos de Tokio, a sus 37 años.
Este domingo no fue el más formidable para el deporte colombiano, la doble medallista Caterine Ibargüen se despidió de los juegos olímpicos de Tokio 2020.
Durante la primera ronda de la final de salto triple, la oriunda de Apartadó, Antioquia, se mantuvo en la marca de los 14,25 metros, esta marca le ubicó por fuera de los 8 primeros puestos (10), lo que le costó la eliminación de la competencia.
Ante su presentación, Caterine expresó palabras de agradecimiento por todo el apoyo brindado y confesó que cumplió una de sus metas, disfrutar los juegos de principio a fin.
“Estoy súper contenta, estoy agradecido con Dios. Estoy feliz por lo hecho. Muchas gracias a mi Colombia, feliz, creo que viví diferente estos juegos. Pude estar aquí nuevamente y me lo gocé. Estoy feliz, contenta, tranquila, me lo gocé” Aseguró Ibargüen a la cadena Caracol Sports.
A pesar de la derrota, Caterine Ibargüen se despide como un ícono del deporte en los olímpicos, debido a su larga trayectoria y vigencia. A sus 37 años se ha ganado el respeto de todo aquel que la ve disputar sus competencias. En cuanto a títulos materiales, la deportista de consiguió dos preseas en los anteriores juegos olímpicos, en Londres 2012 (plata) y Río 2016 (oro).
Por otra parte, Ibargüen se refirió a la deportista Yulimar Rojas, quién además de llevarse la presea de oro en la final de salto triple, rompió el récord mundial con un salto de 15.67.
“Estoy súper contenta por ella. Aprovecho para felicitarla. De verdad que no era un secreto que ella venía para grandes cosas, que gracias a dios se le dio aquí en la pista y que tuvo el día perfecto para realizar sus sueños”, comentó Ibargüen sobre su colega.
“Que Dios la bendiga y que día a día siga desarrollando tan grandes saltos para que nuestro deporte siga creciendo”, concluyó la atleta colombiana.