«ELIMINAR LOS CRIADEROS DE MOSQUITOS PARA PREVENIR EL DENGUE ES UNA TAREA DE TODOS LOS DÍAS»: SECRETARIA DE SALUD DEL ATLÁNTICO

El departamento cuenta con 32 técnicos de salud pública, que se encargan de las labores de prevención y control del dengue.

Gobernación del Atlántico. Fernando Sarmiento, técnico de la Secretaría de Salud del Atlántico, lleva 39 años realizando labor de prevención y control del dengue en los municipios. A día de hoy ya perdió la cuenta del número de casas visitadas, pero lo que sí recuerda es que el mensaje para disminuir los casos en el Atlántico siempre ha sido el mismo: «eliminando los criaderos de mosquitos se mantiene a raya al dengue».

La secretaria de Salud Departamental, Alma Solano, recalcó que la eliminación de los criaderos de mosquitos para prevenir el dengue es una tarea de todos los días.

«Seguimos en el trabajo de prevención del dengue en todo el departamento del Atlántico, con nuestros técnicos de salud en cada uno de los municipios, de la mano con las secretarías de salud», agregó.

Asimismo, reiteró a la comunidad que la única forma de controlar el dengue es eliminando los criaderos de mosquitos en las casas. «Cada vez que nos levantemos en la mañana, vayamos al patio, miremos si tenemos inservibles, eliminemos cualquier elemento que tenga agua y, en el caso de que en nuestras casas tengamos que acumular agua porque no llega de manera permanente, lavemos los tanques y mantengámoslos tapados», enfatizó.

Las jornadas de prevención de dengue que se desarrollan en los municipios, surgen en ocasiones a partir de la identificación de un posible caso. El técnico llega a la vivienda donde existe la sospecha y establece un promedio de 10 casas más a su alrededor, para inspeccionar. Una vez le es concedido el permiso para hacer su labor, el funcionario de la Secretaría de Salud realiza lo siguiente:

-Revisa el patio en busca de depósitos de agua.
-Al encontrar botellas destapadas, las ubica boca abajo para evitar que acumulen agua.
-Se cerciora de que los tanques o albercas, donde se almacena agua para el consumo diario, cuenten con su respectiva tapa.
-El trabajo del técnico incluye un componente educativo, donde les explica a los miembros de cada familia la manera correcta de lavar tanques y albercas, para evitar que se reproduzca la larva que luego se convierte en el mosquito adulto.

En ese sentido se recomienda:
Para su lavado es indispensable el uso de un cepillo de cerdas duras, se debe hacer una mezcla de clorox y agua y aplicarla con el cepillo en el interior del depósito, de abajo hacia arriba. Si el tanque es circular el movimiento de lavado debe ser en ese sentido, con el fin de tumbar los huevos que están pegados en las paredes del recipiente. Por prevención, el lavado del tanque o alberca debe ser semanal.

De igual manera, para prevenir y controlar el dengue se recomienda sembrar las plantas en tierra, rellenar con arena o aceite usado las llantas acumuladas en el patio. También se sugiere destruir en su totalidad las cáscaras de los huevos, cambiar periódicamente el bebedero de agua de las mascotas en casa y mantener secas aquellas zonas de la vivienda donde se estanque el agua.

«La idea es que controlando los criaderos de mosquitos vamos a disminuir el riesgo de padecer la enfermedad. Y en caso de que tengamos los síntomas fiebre, dolor de cabeza, malestar general, se debe acudir inmediatamente al médico. El dengue se puede evitar si controlamos los criaderos, pero además si caemos enfermos podemos evitar llegar a la muerte si acudimos oportunamente al médico», expresó Alma Solano.

A mediados del mes de septiembre, la Gobernación del Atlántico vinculó nuevo personal para reforzar las acciones de vigilancia y educación, para el control del dengue en los 22 municipios del departamento.

Hoy Atlántico cuenta con 32 técnicos de salud y su misión es generar condiciones en la comunidad para la prevención y contribuir a la disminución de casos en esta zona del país.

El mosquito Aedes Aegypti, que genera el dengue, pica en el día, se reproduce únicamente en aguas limpias y pone aproximadamente entre 60 y 300 huevos, que posteriormente se convierten en sarapicos o larvas. Después pasa a un estado de pupa y, finalmente, se transforma en el mosquito adulto