Al enterarme de la no llegada de James Rodríguez al Junior, y la desilusión que esto ha causado en la hinchada rojiblanca, esto me lleva a pensar que la escuadra barranquillera debe estar por encima de la contratación de cualquier futbolista, sin importar sus pergaminos dentro de este deporte.
Por: Oscar Tobón P.
Aunque sé que es triste no poder contar con el diez cucuteño en las filas tiburonas en lo cual me reitero, también es cierto que no se puede obligar a nadie a estar donde esa persona no quiere.
Por otro lado, creo que en este momento se debe respaldar a la institución, y reconocer el gran esfuerzo que hizo la directiva en este caso, para poder vincular al club al capitán de la selección nacional.
Esta fallida contratación debe reafirmar aún más que un equipo de fútbol no lo compone un solo jugador, sino once jugadores dentro del terreno de juego.
por lo tanto, cuando los seguidores del Junior o cualquier otro conjunto van a la cancha, estoy seguro que colman las gradas para observar a la escuadra en general, y no a uno solo de sus integrantes, porque como dice el viejo y repetido adagio popular que aplica de excelente forma en esta situación, y en lo cual fue en lo primero que pensé cuando se dio a conocer la noticia, una sola golondrina no hace verano y Junior siempre será Junior con James o sin él.